Siguiendo el guión

En este caso las pautas y el comportamiento vienen dictadas por la propia naturaleza, como si estuviese escrito desde siempre, un claro caso de colaboración entre los distintos individuos de distintas especies, que necesitan de las habilidades particulares de los demás para un fin común.

Un ejemplo claro lo encontramos en las carroñadas, de tal forma que me asombra y no por esperado, me deja de sorprender; me refiero al papel crucial y particular que cada uno desempeña en perfecta armonía y conjunción, aún cuando el espectáculo no sea ó no parezca especialmente armonioso.

Esa puesta en escena está medida meticulosamente, la aparición del reparto se realiza instintivamente y todos son protagonistas, primeras figuras.

Primero aparecen los córvidos y milanos, después el pequeño de la saga, el alimoche, le siguen los buitres leonados, para terminar con los negros; en algunos "teatros" para despedir la función pueden aparecer los quebrantas; cada cual participa del festín como comensales. Previamente unos han tenido el papel de cantantes, bufones, malabaristas y acróbatas, otros se encargaron del número de cuchillos y sables y los últimos cierran con el de los forzudos.

En ocasiones, dependiendo de la época en el que se desarrolle este festival, el número de actuaciones se puede ampliar con un majestuoso baile protagonizado por alguna reina de los cielos.

En Extremadura podemos deleitarnos con estas funciones en los teatros que las gentes de Photoextremadura y Naturalqueva han puesto en funcionamiento. Mi agradecimiento por su buen trabajo.

En mi caso, como siempre, además de las fotos, disfruto casi más con los momentos en compañía de buenos amigos.

UN SALUDO

Me acuerdo de aquel Martín pescador

De vez en cuando echo la vista a lejanos días para recordar vivencias de niñez, allí en el pueblo donde nací y me crié; las escaramuzas en los sembrados de cereales (confieso que sentía una especial fijación en adrentarme en los sembrados de trigo), los partidillos en las eras, las excursiones al enjuto arroyo cercano a casa, las marchas al pequeño manantial cercano a la estación de tren, en el que me refrescaba en los días de calor.

Lo que más me gustaba era subir a la sierra del castillo (ahora cercada y repoblada de algún tipo de conífera), desde lo alto de esa sierra y oteando de espaldas al pueblo se podía contemplar una extensa llanura (por donde hoy pasa la A66). Desde ese lugar era muy fácil observar el vuelo de los buitres sobre un lugar al que decían el cementerio de los burros, buitres estos que se desplazaban desde la cercana Sierra de Hornachos.

Pero volvamos al arroyo, que transcurría entre moreras y algarrobos, allí ví por primera vez un pequeño pájaro, muy vistoso y con un vuelo endiabladamente rápido, hasta entonces para mí no había un ave más bonita que el jilguero (aún hoy sigue siendo uno de mis favoritos), pero desde luego esos colores anaranjados y turquesas, ese pico tan excepcional, llamaron mi atención, de tal forma que cuando podía me iba al lugar con la esperanza de volver a verlo, algunas veces me obsequiaba con una parada en algún junco en el que se posaba brevemente, lo suficiente como para poder observarlo, a vista desnuda y desde la distancia, con más detenimiento.

Hace unos años el compañero Miguel tenía controlado una zona, en la que era relativamente fácil observarlos y fotografiarlos con éxito, más recientemente gracias al también compañero Jose María he podido realizar algunas sesiones fotográficas; parece que insconcientemente tengo la necesidad de reencontrarme con esta especie al menos una vez al año, más aún, cuando voy de vacaciones a Huelva, tengo un  par de charquitas en las que disfruto con la compañía de tal singular especie.

UN SALUDO

Sed

Ganas y  necesidad de beber que experimentamos, provocadas por un instinto básico que nos exige incorporar líquidos a nuestro organismo. Por si mismo, la sed resulta ser un mecanismo de regulación del contenido de agua en el organismo y uno de los primeros indicios que nos marca la deshidratación.

Hay dos motivos principales que causan la sed , por un lado, la carencia de una correcta hidratación y por otro lado el aumento en la concentración de sales minerales.

Como en cualquier sistema o mecanismo automático, cuando el volumen de agua del cuerpo baja de manera considerable por alguna de las dos razones dichas, el cerebro, provocará la sed para que la persona o el animal en cuestión la satisfagan. Caso que la satisfacción de agua no sea correcta ó no se produzca de ninguna manera, podrían desencadenarse complicaciones orgánicas, entre ellas neurológicas y renales, e incluso la muerte.

La búsqueda de este elemento en esta época del año y sobre todo en algunos lugares especialmente secos, puede suponer todo un esfuerzo para la fauna de la zona, por lo que estos bebederos que preparamos como reclamo para realizar sesiones fotográficas, cumplen perfectamente una doble función, por un lado como escenario para la realización de fotos y por otro como aprovisionamiento de agua a los "bichines".

Tal es la necesidad de agua, que podemos observar como especies que se muestran esquivas e inquietas en los comederos, que al menor click se espanta para no volver, cambia este comportamiento en el bebedero, si bien siguen con una pauta de recelo y cierto nerviosismo, aguantan perfectamente alguna que otra ráfaga.

Quiero hacer una llamada de atención a todos aquellos que tenemos en funcionamiento una instalación de estas características, que seamos constantes y que lo mantengamos durante toda la temporada.

Algunos saciaron su sed en el bebedero que el amigo Sebastián tiene en su campo

Otros lo hicieron en las charquillas que aún luchan por permanecer "vivas"

UN SALUDO

Garza real. Este año va a ser que no

que este año no vamos a tener la suerte de encontrarla en nuesto lugar favorito, la charca está perdiendo mucha agua de forma escandalosa, diría yo. El pasado verano eran encuentros a diario con esta especie tan elegante y majestuosa, varios individuos nos ofrecían todo un espectáculo, vuelos formidables, poses de revista y como no, con las capturas en su alargado pico.

Tal era la confianza que mostraban ante el tumbing que no recelaban en absoluto de posarse ó pescar a escasísimos metros, aceptando esa extraña estructura como un elemento más del paisaje al que no tenían nada que temer.

Pero este año, ojalá me equivoque, no creo que volvamos a tener estos encuentros, al menos tan intensos y continuados, el nivel del agua está bajando, el otro día medimos esta merma, la orilla había retrocedido 15 metros con respecto al último mes, bien es cierto que estamos en la época en la que esto es lo que tiene que suceder, pero en esta ocasión esta bajada es similar a la del mes de setiembre de otro año con similares indices pluviómetros en el otoño y primavera anteriores.

Veremos si podemos repetir escenas como estas:

UN SALUDO

Temporada de baño

Este año no he podido acompañar al apañero Miguel a su bebedero como en otros, han sido escasas las sesiones de las que he podido disfrutar, pero lo suficiente como para vivir, como siempre, buenos ratos.

Todos sabemos que hay especies asiduas al baño, sea la época del año que sea, incluso con muy bajas temperaturas, pero ese trasiego continuo, la necesidad de un refrescante e intenso baño se acentúa con la llegada del calor y por consiguiente de temperaturas abrasadoras. Como cabe esperar los que más disfrutan son los retoños, eso sí, siempre bajo la atenta mirada de algún progenitor.



UN SALUDO refrescante