Tres sinónimos que definen fielmente el comportamiento de una serie de aves, sobre todo las de menor tamaño y envergadura; si ya las currucas son eléctricas y los mosquiteros epilépticos, el amigo que nos ocupa es una mezcla de ambos, pero en un grado superior.
Desaparece del visor con una velocidad endiablada, localizarlo de nuevo para volver a "meterlo" en el encuadre es de nota, no digamos ya enfocarlo; el comentario habitual con tu compañero de aguardo es "donde está ahora, que no lo veo", y es que no para quieto el majete, hasta el punto que pareciese que hubiese más de un ejemplar, cuando sólo hay uno. Así se las gasta este simpático Chochín
Gracias Jose Maria por darme la oportunidad de retratar tanto al Cochín como al Mirlo capiblanco.
UN SALUDO